martes, 26 de abril de 2011

No llores si me amas... San Agustín

No llores si me amas,
Si conocieras el don de Dios y lo que es el Cielo!
Si pudieras oír el cántico de los ángeles y verme en medio de ellos!



Si pudieras ver desarrollarse ante tus ojos;
los horizontes, los campos y los nuevos senderos que atravieso!
Si por un instante pudieras contemplar como yo,
la belleza ante la cual las bellezas palidecen!


Cómo!...
¿Tú me has visto, me has amado en el país de las sombras
y no te resignas a verme y amarme en el país de las inmutables realidades?

Créeme.
Cuando la muerte venga a romper las ligaduras
como ha roto las que a mí me encadenaban,
cuando llegue un día que Dios ha fijado y conoce,
y tu alma venga a este cielo en que te ha precedido la mía,
ese día volverás a verme,
sentirás que te sigo amando,
que te amé, y encontrarás mi corazón
con todas sus ternuras purificadas.
Volverás a verme en transfiguración, en éxtasis, feliz!
ya no esperando la muerte, sino avanzando contigo,
que te llevaré de la mano por senderos nuevos de Luz...y de Vida...
Enjuga tu llanto y no llores si me amas!


San Agustín, inspirado desde el cielo por su madre Santa Mónica

lunes, 25 de abril de 2011

¿Qué tenemos qué hacer?

Mensaje de Jesús - La Palabra continúa...

¡Mis criaturas!
Cuando se habla del amor, y hoy se habla mucho... si no se lo pone en práctica es mejor no hablar de él... ¡y muchos hablan de él en estas épocas! Mucho más que en otros tiempos, y cuando más es nombrado, más es olvidado este sentimiento que se hace palpable con la caridad.
En aquel tiempo, y para todo tiempo he pedido a los hombres, que aprendieran a amar, a ser entonces caritativos porque con el amor puesto en práctica, o sea con la caridad, el mundo sería muy distinto. No os pido solamente la caridad material, sino todas las formas de caridad.
Vosotros que vivís en lo material, que sois del mundo, creéis que la caridad consiste en dar dinero, a veces dar ropas en desuso o a veces hacer alguna beneficencia... No, la caridad tiene tantas, tantas otras formas de amor que Yo querría ver en vosotros.
¡La caridad consiste en saber vivir entre los demás con sacrificio, lealtad, amor!
Por cierto que dar cosas materiales es caridad, ¡pero antes, y sobre todo, está el espíritu! La caridad es dar para el espíritu.
Por lo tanto, testimoniar la Verdad y conducir las almas de los hermanos hacia Mí es caridad.
Y también es caridad ser honestos con el prójimo, es caridad consolar. A veces una sonrisa, cuando no se tienen ganas de sonreír porque el corazón duele, es caridad hacia aquellos qué también llevan el dolor en el corazón.
Caridad es el deseo de estar en paz con todos, es demostrar con todo tipo de gestos el amor hacia el prójimo, hacía todo prójimo: desde el más cercano y los otros, esos que pasan a vuestro lado y no conocéis bien o desconocéis del todo.

Tu, que dices que me amas y te falta caridad aun hacia los que te son vecinos, los más cercanos que viven a tu lado, no digas ya que me amas, ¡no me gusta la mentira!

Tú das de ti mismo solamente a quien te ama, y aun para hacerles a los tuyos la vida mejor engañas al prójimo, porque a ellos quieres darles mucho y a los demás no darías nada: ¡no puedes caminar en mi sol si antes no reflexionas para cambiar completamente, y después vienes Conmigo!

Y tú que das lo que te sobra no eres caritativo, sino que quieres sentirte en paz contigo mismo, sin conseguirlo. Y vosotros que predicáis la caridad, ¡y no con el ejemplo!

"Si tienes dos abrigos, regala uno..."
Cierto, dad por en proporción a lo que tenéis, no os digo desnudaros sino que seáis generosos. Vosotros que dais vuestras horas al que tiene necesidad de vosotros, sois caritativos, así como vosotros que no juzgáis, que no abusáis de los demás, vosotros que no os aprovecháis de la bondad de los hermanos...

La caridad tiene muchas formas, infinitos matices, la caridad es el amor, del que tanto hablan...

Sed silenciosos y manejad el amor en silencio, ponedlo en práctica, eso se transforma en caridad y vuestra alma se vuelve luminosa, y Yo, vuestro Rabí, en verdad os digo: esa luz que proviene del alma permite alumbrar muchos senderos oscuros, como por los que Yo pasé cuando viví en mi Tiempo.
Entonces... regala tu abrigo, tus horas, tu paciencia, tus sacrificios... No temas, lo que regalas a los hermanos Me lo regalas a Mí, y nada se pierde.

viernes, 22 de abril de 2011

El sacramento de la Confesión

Mensaje de Jesús del Libro La Palabra Continúa...

¡Los sacramentos alimentan el alma! ¡No son actos o tradiciones!
La penitencia, o bien, la confesión es decirme a Mí lo que no consideráis justo en vuestro modo de pensar y obrar.
Decidme abiertamente lo que os hace sentir culpables, debéis abrir vuestra alma y... hablarme a través de uno de Mis ministros que, en esos momentos escucha por Mí lo que vosotros confesáis.
Muchos de vosotros dicen que pueden igual y directamente hablarme a Mí.
Ciertamente podéis hablarme a Mí, ¡soy el Rabí! Sin embargo, en ese hablar está el amor por Mí, la confidencia. Eso es oración y Yo la escucho pero no es un sacramento puesto que los sacramentos solamente Mis ministros pueden administrarlos: para esto sirven a la Iglesia.


¡Y, vosotros no digáis que no os gusta hablarle a un hombre como vosotros!

No es como vosotros el confesor cuando os escucha porque me remite a Mí vuestras culpas, ¡entonces no debéis juzgarlo, ni mirar quién es!
¡Es un ministro Mío, como cualquier otro ministro Mío, que me ha entregado su vida terrena, que se ha consagrado a Mí!

De su alma, Yo Me ocupo, Yo sé, vosotros miradlos siempre con afecto fraterno, con amor filial: el juicio me corresponde a Mí y a Nuestro Padre, a vosotros no debe importaros lo que ellos hacen a veces: miradlos como mediadores, porque Me sirven y os sirven, puesto que la Iglesia soy Yo, Jesús, y sois todos vosotros.

miércoles, 20 de abril de 2011

Todo es y será entre tú y Dios... Nunca fue entre tú y ellos.... Hermoso mensaje!!!

A veces las personas son egoístas, ilógicas e insensatas…
AÚN ASÍ… PERDÓNALAS…
Si eres amable, las personas pueden acusarte de egoísta e interesado…
AÚN ASÍ… SÉ AMABLE…
Si eres un vencedor, tendrás algunos falsos amigos y algunos enemigos verdaderos…
AÚN ASÍ… VENCE…
Si eres honesto y franco, las personas pueden engañarte…
AÚN ASÍ… SÉ HONESTO Y FRANCO…
Lo que  tardaste años en construir, alguien puede destruirlo en una hora…
AÚN ASÍ… CONSTRUYE…
El bien que hagas hoy, puede ser olvidado mañana…
AÚN ASÍ… HAZ EL BIEN…
Si das al mundo lo mejor de ti, eso puede que nunca sea suficiente…
AÚN ASÍ… DA LO MEJOR DE TI MISMO…

A FIN DE CUENTAS… TODO ES Y SERÁ ENTRE TÚ Y DIOS.
NUNCA FUE ENTRE TÚ  Y ELLOS.

viernes, 15 de abril de 2011

El Hijo - Hermoso cuento que quiero compartir con todos ustedes

Un hombre rico y su hijo tenían gran pasión por el arte.
Tenían de todo en su colección; desde Rafael hasta Picasso.
Muy a menudo, se sentaban juntos a admirar las grandes obras de arte,
desgraciadamente, el hijo fue a la guerra.
Fue muy valiente y murió en la batalla mientras rescataba a otro soldado.
El padre recibió la noticia y sufrió profundamente la muerte de su único hijo.
Un mes mas tarde, justo antes de la Navidad, alguien tocó a la puerta.
Un joven con un gran paquete en sus manos dijo al padre:
Señor, usted no me conoce, pero yo soy el soldado por quien su hijo dio la vida.
Él salvó muchas vidas ese día, me estaba llevando a un lugar seguro cuando una bala le atravesó el pecho, muriendo  así instantáneamente.
Él hablaba muy a menudo de usted y de su amor por el arte.
El muchacho extendió los brazos para entregar el paquete: "Yo sé que esto no es mucho.
Yo no soy un gran artista, pero creo que a su hijo le hubiera gustado que usted recibiera esto."
El padre abrió el paquete. Era un retrato de su hijo, pintado por el joven soldado. Él contempló con profunda admiración la manera en que el soldado había capturado la personalidad de su hijo en la pintura. El padre estaba tan atrapado por la expresión de los ojos de su hijo que los suyos propios se arrasaron de lágrimas.
Le agradeció al joven soldado y ofreció pagarle por el cuadro. “¡Oh no, Señor, yo nunca podría pagarle lo que su hijo hizo por mí. Es un regalo!!”
El padre colgó el retrato arriba de la repisa de su chimenea.
Cada vez que los visitantes e invitados llegaban a su casa, les mostraba el retrato de su hijo antes de mostrar su famosa galería.
El hombre murió y unos meses más tarde y se anunció una subasta con todas las pinturas que poseía.
Mucha gente importante e influyente acudió con grandes expectativas de hacerse con un famoso cuadro de la colección. Sobre  la plataforma estaba el retrato del hijo.
El subastador golpeó su mazo para dar inicio a la subasta.
"Empezaremos los remates con este retrato del hijo,  ¿quién ofrece por este retrato?"
Hubo un gran silencio. Entonces una voz del fondo de la habitación grito:
"Queremos ver las pinturas famosas, Olvídese de esa".
Sin embargo el subastador persistió:
"¿Alguien ofrece algo por esta pintura? ¿$100.00? ¿$200.00?"
Otra voz gritó con enojo: "No venimos por esa pintura,
Venimos por... los Van Goghs, los Rembrandts. Vamos a las ofertas de verdad"
Pero aún así el subastador continuaba su labor: "El Hijo, El Hijo, El Hijo...
¿Quién se lleva El hijo?"
Finalmente una voz se oyó desde atrás, el viejo jardinero del padre y del hijo. Siendo un hombre muy pobre, ofreció lo único que podía ofrecer, $10.
"Tenemos $10 ¿Quién da $20?", grito el subastador."
La multitud se estaba enojando mucho.  No querían la pintura de "El Hijo".
Querían las que representaban una valiosa inversión para sus propias colecciones.
El subastador golpeó por fin el mazo:"Va una, van dos,
VENDIDA por $10"
"Empecemos con la colección!", gritó uno.
El subastador soltó su mazo  y dijo: "Lo siento mucho, damas  y caballeros, pero la subasta llego a su final"
Pero, ¿y las pinturas?", dijeron los interesados.

"Lo siento" Contestó el subastador "Cuando me llamaron para conducir esta
Subasta, se me dijo de un secreto estipulado en el testamento del dueño."
Yo no tenía permitido revelar esta estipulación hasta este preciso momento.
Solamente la pintura de "EL HIJO" sería subastada.
Aquel que la aceptara heredara absolutamente todas las posesiones de
este hombre, incluyendo las famosas pinturas.

El hombre que aceptó quedarse con "EL HIJO" se queda con TODO"!!!


REFLEXIÓN: Dios nos ha entregado a su Hijo, quien  murió en una cruz hace más de 2000 años. Así como el subastador,  su mensaje hoy es:
"EL HIJO, EL HIJO, ¿QUIÉN SE LLEVA EL HIJO?" Quien ama al Hijo lo tiene todo.


UN GRAN ABRAZO A TODOS Y POR FAVOR NO OLVIDEN QUE JESÚS LOS ESPERA...

sábado, 9 de abril de 2011

¿Por qué DIOS tuvo necesidad de crear al hombre?

Mensaje de Jesús

¡Mis criaturas!
Mis palabras hacia vosotros, como a los primeros, muchas veces están con vosotros cuando a menudo me llamáis, o bien me invocáis; la Trinidad está en vosotros que la reflejáis, ya que el hombre es a imagen y semejanza de DIOS: Su criatura, para la que se ha creado un universo.
Algunos, mejor dicho, muchos, se preguntan:
"¿Por qué DIOS tuvo necesidad de crear al hombre?".
Así un día de aquel tiempo, me preguntó esto Judas, el que después me traicionó:
"Rabí, ¿por qué DIOS ha creado al hombre? Pienso que un DIOS no tiene necesidad de nada. ¿De qué le sirve el hombre a DIOS? ¿Y por qué, entonces, DIOS creó algo que a Él no le podía servir?..."
"¡Judas, Judas! ¡Tú ves cada cosa y cada hecho en función de lo que puede servir o producir en lo material! DIOS Trino, siendo amor, se expande en el amor por encima del tiempo, lo engrandece y crea para la felicidad de Sus criaturas, porque para ellas ha creado la felicidad del espíritu!".
"Rabí, ahora bien, el espíritu será importante, por cierto, tú lo dices, pero si DIOS es amor ¿por qué permite el sufrimiento, por qué lo envía sin que se lo pidan a aquellos que no hacen mal, inclusive a aquellos que tú llamas: los justos?".
 " No es el mundo–tierra el lugar de felicidad de las criaturas, Judas, el mundo–tierra es una pausa para ir más allá, un punto de partida, la prueba y la carga de la carne para utilizar el alma para el bien o para el mal, puesto que el hombre es libre y puede discernir".
" Rabí,, pero tú que has venido a traer la Verdad, ¿traerás también la felicidad a la tierra? ¡De otra manera no te creerán! El hombre desea la riqueza, y la riqueza da todas las comodidades".
"Judas, Judas, levanta tu mirada de la riqueza material, cierto, da comodidades, pero asfixia al espíritu y lo deja árido y perezoso, hace egoísta al hombre... Yo no traeré la riqueza a la tierra. Yo muestro el camino del Cielo, donde la riqueza es muy superior y será para siempre. Judas, Yo no Me complazco en aquellos que aman el dinero más que cualquier otra cosa, los compadezco, y a todos vosotros digo que tratéis de cambiarlos, no los amo por lo que hacen, los amo como a toda criatura, y por misericordia.
Mira, Judas: amo a todos, pero no puedo amar muchas cosas que veo en ciertas almas; esas serán mis espinas, cosa que tú ahora no puedes saber; tú trata de no ser una de mis espinas..."
"Rabboni, ¡no comprendo!"
"¡Lo sé, Judas! ¡Yo te doy palabras de luz, de ti depende mantener esta luz!"
Y a vosotros, Mis criaturas, después de haber dicho de Judas que veía el poder y el bienestar solamente en el dinero, en verdad os digo:
Lo suficiente, la tranquilidad conquistada con el trabajo honesto debe bastar al hombre de fe, y hacer que agradezca por todo ello al Cielo.
Y si algunos no tienen ni siquiera lo suficiente, aun siendo ellos justos: he ahí su prueba que vosotros, a pesar de conocerlos, podréis aliviar: ¡mis manos!
Si os hago encontrar a quien tiene hambre y sed, corresponde a vosotros aplacar su hambre y calmar su sed, ya sea de fe o de cosas materiales.
Vosotros abandonados a Mí, ofreceos a Mí y Yo os enviaré aquellos que convendrán para vosotros. Sea que tengan ellos hambre y sed de espíritu o de materia.

Yo, vuestro Rabí, comprendo vuestra humanidad, vuestras debilidades y temores. También esas cosas son pruebas para vosotros, ¡pero os quiero pobres de espíritu! ¡Yo, vuestro Rabí, un pobre Rey con corona de espinas, un Rey que nada poseía en riquezas del mundo, un Rey radiante de gloria que os espera en Su Reino!

La fe es creer sin querer ver...

Mensaje de Jesús - Extracto del libro La Palabra Continúa...

Tomás me dijo:
"Rabí, ¿cómo puede el hombre creer en un creador si nunca lo ha visto? ¡Yo creo en tus Palabras, pero creo porque te veo y te escucho! ¿Y quién no te conoce?"
"Tomás, la fe es creer sin querer ver. ¡Dichosos aquellos que creen con confianza, y ven como si realmente hubiesen visto! Tomás lo sabes: creer es ver sin haber visto ni pretender tocar... ¡Hablaremos aún de esto otro día! Aquellos que no me conocen me conocerán, y cuanto más me quieran conocer, más me amarán.
"¡Aquellos que vendrán más adelante me conocerán a través de mis palabras, que dejaré a algunos de vosotros, me conocerán porque mi historia es verdadera, soy la Verdad y la Vida y soy el Maestro, vuestro Rabí, te hablo a ti, Tomás, y hablaré al mundo y también por medio de ti!".
La fe en Mí tiene más mérito cuanto más es confianza. ¡Felices aquellos que creen ciegamente! Ellos son los más puros.
"Rabí, y si la fe es un don del Creador, si quienes creen ciegamente son los elegidos, entonces, ¿y los demás?".
"Tomás, la fe es don y conquista, puesto que DIOS lo puede todo y el hombre es libre de obrar el bien o el mal. Es libre de venir Conmigo, de seguirme, o de seguir otros caminos: pero seguirme a Mí conduce a la Vida.
"Pisar mis huellas por caminos empinados es venir a la Vida, por esto he elegido vivir como hombre en el pensamiento del Padre, en la Trinidad, como hijo.
"¡Y vosotros que me veis me amáis también humanamente, pero también aquellos que no Me verán más que en Mis Palabras dejadas para ellos, me amarán si me quisieren amar puesto que Yo estoy en medio de vosotros ahora, y más adelante estaré en medio de ellos cuando hablaren de Mí, junto a ellos cuando pensaren en Mí, dentro de ellos cuando obraren por Mí!".
Se había hecho de noche, Tomás callaba y pensaba en mis palabras y Yo, Jesús, estaba junto a él...

lunes, 4 de abril de 2011

Te espero, no estoy lejos, justo del otro lado del camino...

EL AMOR NO DESAPARECE NUNCA
La muerte no es nada.
Simplemente me he ido a la pieza de al lado.
Yo soy yo, tú eres tú.
Lo que éramos el uno para el otro lo seremos siempre.
Dame el nombre que siempre me has dado.
Háblame como lo has hecho siempre, no emplees un tono diferente.
No adoptes un aire solemne o triste.
Sigue riéndote de lo que nos hacía reír juntos.
Ora, sonríe, piensa en mí,
Reza por mí.
Que mi nombre sea pronunciado en casa como lo fue siempre, sin énfasis de ninguna clase, sin nada sombrío.
La vida significa todo lo que ella ha significado siempre y es lo que siempre ha sido.
El hilo no se ha cortado.
¿Por qué yo habría de estar fuera de tu pensamiento, simplemente  porque estoy fuera de tu vista?

Te espero, no estoy lejos, justo del otro lado del camino.


Como ves, todo está bien...

               

Canon Henry Scott Holland